Era una mona Araña adulta, una Ateles de color marrón
oscuro, que fue donada al zoológico cuando su vida útil como artista , terminó.
Eran tres, dos hembras y un macho de color negro, ya
cansados de complacer al público asistente a las funciones del Circo.
Sissi se destacó, del macho no se recuerda el nombre, de
ella sí…….. acostumbrada al contacto humano, era de fácil manejo y su estancia
transcurría sin grandes alteraciones……..hasta que un día, muestra una conducta
diferente.
Comenzó a morderse la larga cola, causándose escoriaciones y heridas y fue trasladada a la clínica para
ser tratada de las lesiones y observarla
con más cuidado.
Los donantes no
sabían la edad aproximada, pues al parecer fue cambiando de entrenador y de
lugar…..a través de su vida.
Decidimos mantenerla en observación y cuidados
especiales…….Diariamente se le hacían curas en la cola, que fue empeorando
porque no mantenía ni el vendaje, ni los medicamentos, se lo comía todo.
Se descartó una micosis que le provocara escozor, una
deficiencia nutricional, y no se pudo
aislar un agente externo que provocara aquella conducta de
auto-mutilación………….
. Diariamente se probaban medicamentos y medios, la cola
empeoró, perdió el pelo, y las escoriaciones se mantenían. Probamos con todo lo posible, e hicimos todos los análisis con los medios de que disponíamos.
En ese período se le
diagnosticó un embarazo sin precisar de cuanto tiempo, no poseíamos medios
diagnósticos, solo clínicos….Hasta pensamos en un “rechazo” a la preñez, no era
un animal joven.
Una mañana amaneció a su lado una cría que nació muerta.
A partir de ese día, aumentó el afán de morderse. Se
agarraba la larga cola y se sentaba a comérsela como si fuera un dulce………………y
continuó con los brazos…………..ya no era posible detener la mutilación de su
cuerpo a la que se dedicaba con afán………….De tanto vendaje parecía una momia y
cuando una zona se recuperaba, volvía a morderla.
Agotados los recursos, se determinó el sacrificio sanitario de este ejemplar…..y
es aquí donde nos damos cuenta de que no conocemos casi nada de las conductas instintivas ……………
Diariamente, y por un largo tiempo, se le manipulaba sin
dificultad, solo entrar a la jaula, sujetar su cabeza y brazos y cargarla para
llevarla a la mesa de curaciones………..
El día en el que le iba a administrar una dosis superior de
anestésico , y cuando entramos a la jaula, con la jeringuilla oculta detrás de
la espalda……………nos atacó……..
¿Presintió la intención?
¿Le alertó nuestra actitud
indecisa? ¿Olió el miedo y la
inseguridad? No sabemos.
Cada vez que hablamos
de conductas previsibles por parte de un
animal, ponemos este ejemplo, nadie sabe
en un momento determinado, cómo van a reaccionar.
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