¿Dónde habita la rana más pequeña del mundo?

(cienciadecuba.wordpress.com)

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Por estos días en que tanto se habla de la defensa de nuestra biodiversidad y de la preservación de especies en amenaza de extinción, un dato curioso asalta a estudiosos y conservacionistas: ¿Habita en Cuba la rana más pequeña del mundo?
Estos animalitos que a menudo nos sorprenden en los alrededores o en el interior de nuestras casas no son los más diminutos de su especie.
Frecuentemente las personas que se encuentran en sus patios con estos anfibios, que pueden medir de tres a cinco milímetros (mm), creen que ese es el más chico del mundo.
En realidad, la criatura más minúscula de esa especie en la Isla habita en bosques húmedos de zonas específicas del oriente del país, como es el caso de la región costera entre Nibujón y Santa María, en la provincia de Holguín, y en el macizo de Nipe-Sagua-Baracoa.
Los sapillos hallados en nuestras viviendas pertenecen a la especie Eleutherodactylus, que en la etapa de adolescencia pueden registrar un tamaño de tres mm, pero cuando crecen alcanzan una longitud de entre 15 y 27 mm.
Para medir las ranas se espera a que lleguen a su madurez, momento ideal para conocer la máxima dimensión que alcanzan, dijo a la AIN Antonio Cádiz, profesor de la Facultad de Biología de la Universidad de La Habana.
El libro “Anfibios y reptiles de Cuba”, de la autora Lourdes Rodríguez Schettino, revela que la Eleutherodactylus Iberia –la cual debe su nombre lugar al donde fue recolectada por primera vez en 1994, el Monte Iberia, en el macizo Sagua-Baracoa– posee el récord de ser la más pequeña del país, aunque cuando fue descubierta se consideró también la más chica del mundo.
Según aparece en el texto, sus dedos y discos digitales son reducidos, lo que le facilita caminar sobre las hojas caídas, en lugar de saltar como sus parientes arborícolas o nadadoras.
Las hembras -añade el libro- ponen un solo huevo de 4,1 mm de diámetro, que representa el 33 por ciento de su tamaño máximo (12,3 mm). Los machos alcanzan la medida de 11,5 mm y varios colores los identifica: negro, amarillo, naranja y marrón, con conspicuas listas blancas en sus costados.
En Cuba existen cinco especies de estos anfibios del género Eleutherodactylus, en las que la miniaturización alcanza niveles extremos y hoy están entre los tetrápodos más pequeños del mundo.
Su disminución de tamaño es el resultado de la etapa evolutiva, relacionada con procesos biogeográficos que dieron origen a la fauna antillana.
Y para que no queden dudas, la rana más chica del orbe, llamada Sapo Pulga o Psyllophryne Didactylo, se encuentra en Brasil. Los machos de esa especie alcanzan una longitud de 8,6 mm y las hembras 10,2 mm.