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El rinoceronte blanco del sur está catalogado como “Casi Amenazado” por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, con 10.080 animales en existencia. Por eso, en Europa existen programas de reproducción en los zoológicos que juegan un papel crucial en el rescate de los rinocerontes blancos, ante su captura y asesinato por la gran demanda de su cuerno en Asia, especialmente en China y Vietnam, donde se le considera un afrodisíaco natural en la medicina tradicional.
Criar a estos animales en cautividad es difícil porque una hembra solo da a luz una cría una vez cada tres o cuatro años, tras un periodo de gestación de 16 meses. Esto explica que los zoológicos se esfuercen para aparear a dos individuos de esta especia cuando es el momento adecuado para tratar de conseguir más ejemplares.
Pero, un intento de apareamiento reciente en el zoológico Wildlands de Emmen (Holanda) ha tenido un final inesperado y trágico.
Elena, una hembra de rinoceronte, se ahogó intentando escapar de Limpopo, un macho de rinoceronte blanco del sur (Cerathoterium simum simum).
Los cuidadores del zoológico consiguieron alejar al macho, pero “ya era demasiado tarde y ella ya se había ahogado”, asegura el zoológico.
Limpopo, de 19 años, había llegado al parque a principios de septiembre desde otro zoológico holandés donde engendró tres crías como parte de un programa de reproducción europeo.
El macho y las dos hembras de rinoceronte del zoológico de Wildlands, las hermanas Elena y Zahra, empezaron a conocerse oliéndose y viéndose desde recintos separados. El jueves pasado estaba planeado juntarlos los tres. “A partir de ese momento se puso inquieto, las dos hembras se sobresaltaron y ambas escaparon de él”, dijeron los responsables del zoo. “Como resultado, Limpopo las persiguió. Parecía particularmente concentrado en Elena, porque ella era la más cercana a él”, añaden.
Ambos animales parecían agotados después de 15 minutos de persecución y Elena se deslizó en un charco de agua poco profundo, aterrizó de costado y no pudo levantarse. Los cuidadores no pudieron evitar que se ahogara.
Limpopo había sido trasladado de un zoológico alemán hace seis años porque “no trató a la hembra correctamente”, dijo el periódico Brabants Dagblad.
El zoológico dijo que tal introducción “a menudo requiere intervención, pero nunca antes una ha sido fatal”.
En su hogar más reciente, el parque de safari Beekse Bergen cerca de Tilburg en el sur de los Países Bajos, era un “criador probado” que vivía con una manada de seis hembras.
